Sirva esta entrada como homenaje a la gran banda de comedy rock Tenacious D compuesta por Kyle Gass y Jack Black (sí, el actor). Debo ser de los pocos fans que tenga esta banda en España...
Tienen 3 discos y una película que están en mi haber. La película "Tenacious D in the Pick of Destiny" es digna de ver, buenísima. El 6.7 de IMDB no le hace justicia. Por no hablar de la pésima traducción al español: "Dando la nota". Es la película que más veces he visto en edad adulta. Sí, edad adulta... Esa peli merece post aparte, ahora solo quiero hablar de la canción que le da título a este post, de su último disco Rize of the Fenix (buenísimo el juego de palabras).
La canción "Low Hangin' Fruit" me pareció simpática la primera vez que la escuché al comprarme el disco, pero desde que leí y comprendí la letra me descojono cada vez que la oigo. Según la segunda acepción del Urban Dictionary, significa:
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Girls who are somewhat hot - but not too hot, and who often work in posiitons of high public interaction but with low-barriers-to-entry, thus making them open and attractive targets on the one hand, but often self conscious and/or harboring self esteem issues on the other. This, as a whole, makes them susceptible and quite receptive to any overtures from the opposite sex. I.e., They are the easiest of fruit to pick.
Salty just can't stop picking that low-hanging fruit, he just brought home his fifth receptionist this motnh.
Nada mejor como continuación de un antiguo post sobre la exploración en el planeta gris pintado de rojo que lo que sigue a continuación. Es probablemente el mejor uso de dinero público de la historia. El descubrimiento de vida alienígena palidecería en comparación con esta hazaña puesto que el Hombre ha cumplido finalmente su sueño:
Que no me vengan con excusas de que es que el rover funciona así o que no es a propósito. La foto está echada con toda la intención.
NdelA. Sí, he evitado hablar del sueño de la humanidad y lo he hecho especificamente del Hombre. Sobre el sueño de la Mujer no estoy cualificado para opinar... ¿plantar florecicas en la superficie marciana?
Antes pensaba que hablar de fútbol era de gente con poca cultura, un entretenimiento para los tontos, donde se sentían importantes hablando de algo como si tuviera trascendencia.
No se si por desgracia o por suerte, eso ha cambiado. Ahora el entretenimiento de los tontos es la política donde sin tener ni pajolera idea, hasta el tonto del pueblo es capaz de darte la brasa durante horas.
Antes los tontos hablaban de un tema sin trascendencia y donde el fanatismo no tenía mayor importancia. Sin embargo ahora los tontos no solo hablan, sino que se agrupan, como si su causa fuera buscar el santo grial, ya que poco menos están dirigidos por la santa providencia.
¿Y que ahora surja este tema a que viene?. Pues no, no se debe, como podría parecer, a algún percance mio con un perroflauta ni nada similar. Simplemente era para justificar poder poner la foto siguiente.
Prefiero reírme con el fútbol, que para arreglar la política y el mundo ya hay demasiada gente.
En este TOP me gustaría hacer una compilación sobre las 10 mejores canciones/grupos que nos ponía mi padre en el coche, o en el tocadiscos de casa. Grupos que formaron en cierta medida mi gusto por la música y que son parte del porqué del post que encargué a Klaus. Por cierto, mi padre puede ser que incluso lea esto... ¡hola!
Este top depende mucho de los recuerdos que tengo asociados a cada grupo o canción en particular y el momento en que los escuché. Me centraré en cosas que me gustaran entonces y que aún me gustan hoy (evitaré cosas como Los Panchos, por ejemplo, que no me gustaban entonces y aún hoy en día me traumatizan). Evitaré cosas también demasiado evidentes (es decir, los Beatles). La lista depende de mi memoria, de que los recuerde a vuelapluma sin rebuscar por la colección de vinilos y cassettes que está aún por ahí. La memoria funciona de manera extraña y, por ejemplo, recuerdo este disco pero no tengo la más mínima idea de cómo suena. Lo buscaré en youtube.
Para terminar la introducción solamente decir que mi padre era un poco hipster (para mi padre: Hipster: esnob del s. XXI al que le da por llevar gafas de pasta) en su día y le gustaba escarbar por grupos algo alejados de la mainstream (o lo que era la mainstream en la España de los 70). No era tan obtuso como para renegar de los Beatles pero si tenía que comprarse algo no se compraba lo que se compraba todo el mundo. Tan hipster no era, supongo, al fin y al cabo si llevaba gafas era porque no veía tres en un burro sin ellas.
Basta de introducción, aquí el top 10.
10. Donovan
Me acuerdo del vinilo, que siempre caía cuando a mi padre le daba por ponerse discjockey. Lo tenía olvidado completamente pero lo oí recientemente en la radio y dije sin dudar: Donovan y empecé a tarear la canción. A decir verdad si no lo hubiera oído hace poco probablemente no estaría en este top.
10. Jefferson Airplane
No era de los que más nos ponía pero la canción White Rabbit me subyugaba y lo sigue haciendo. Psicodelia en estado puro. Si comparte el número 10 de este top 10 es porque quería poner 11 grupos ni más ni menos.
9. JJ Cale
Gran guitarrista de blues, voz cazallera y creador de genialidades. Suyo es el Cocaine que Clapton versioneó haciendo peor y llevándose la fama. Me acuerdo de que los dos cassettes que teníamos de él eran azules, lo que llamaba bastante la atención. Bueno, aquí un ejemplo de lo que hacía...y que cuando oigo aún hoy no paro de tararear.
8. Al Stewart
Una de las pequeñas joyas que tenía mi padre en su colección. Sus canciones se me pegaban de crío y cada vez que las escucho de nuevo me suenan aún familiares, próximas, y me recuerdan vagamente a cuando las escuchaba por primera vez. Según parece a Al Stewart le fastidia que su único hit single, Time Passges, haya quedado como música de ascensor. A mi me gustan especialmente Year of the Cat y sobre todo esta:
7. ELO
Un día mi padre apareció con un cassette de ELO, Electric Light Orchestra. No había oído nunca sobre ellos y la cinta era uno de sus últimos trabajos: el Secret Messages de 1983, que no es por lo que se hicieron famosos. Mi hermano estaba enganchado a la cinta y la pedía en el coche una y otra vez y solamente por eso se merece estar en este top. Nos hacía gracía una canción que hablaba de Spain, aunque fuera la más floja del disco (por supuesto, no teníamos ni idea de qué iba). Agradezco no saber entonces la pinta que tenía Jeff Lyne.
6. Hair
No es un grupo, es la banda sonora del musical del mismo nombre que llevó a la pantalla Milos Forman. La película es altamente recomendable pero yo lo conocí por la cinta que tenía mi padre, cuyo subtítulo en español "Rock Clásico" no me terminaba de cuadrar. En mi opinión, es el musical con mejores canciones de la historia, todo hits que no necesitan de la historia de la película para ser canciones geniales. Aquarius y Let the Sunshine In le sonaran a todo el mundo. Versioneadas y destrozadas hasta la extenuación. Yo me quedo con I got Life.
5. CCR
Creedence Clearwater Revival. La leche. No era parte de la colección original de mi padre (es decir, de antes de nacer nosotros) pero cuando nos lo puso se convirtió directamente en uno de los favoritos en el coche. Los riffs de guitarra eran el rock duro de los 60. No necesitan mucha presentación.
4. Mike Oldfield
Mi padre tiene el vinilo de Tubular Bells y de vez en cuando nos los ponía, intentando que estuviéramos atentos a los 25 minutos de canción ininterrumpida que duraba cada una de las dos caras del disco. Era imposible, claro. Pero no es de ese disco del que quería poneros algo, sino de una cinta que mi padre tenía grabada de alguien porque una de sus canciones era mi favorita total cuando era pequeño. No estoy siendo muy original puesto que es su mayor éxito comercial.
3. King Crimson
La releche. Si me interesé y me sigo interesando por el rock progresivo de los 70 es porque mi padre me ponía esto. Se ha convertido sin duda en uno de mis grupos preferidos. ¿Por qué no está más arriba en la clasificación? Entre otras cosas porque no me gustaban tanto al principio y solamente de adolescente fui redescubriéndoles. Aquí una de sus genialidades:
2. Franco Battiato
Genial. Como muchos, mi padre conoció a Franco Battiato cuando empezó a traducir las canciones al español sacando dos discos compilaciones de sus anteriores éxitos en italiano. No sé cuándo compró las dos cintas pero nos descubrieron un mundo nuevo. Las letras indescifrables que nos sabíamos de memoria y una música casi vanguardista que ha ido incluso ganando con el tiempo. Fue famosísimo en España, hasta teniendo a los Martes y 13 imitándolo. Os lo dejo aquí en italiano, que es mejor.
1. Moody Blues
El grupo favorito de mi padre. Creadores de el rock sinfónico, vanguardistas en unir música clásica y rock, pioneros en el uso de sintetizadores, inventores del disco conceptual, etc. Conocieron la fama universal gracias a una canción: Nights in White Satin, que le suena a todo el mundo, pero iban muchísimo más allá. Era un supergrupo en el que absolutamente todos componían y cantaban y aún así guardaban coherencia. Su concepto estaba tan adelantado a su época que al final su época nunca les llegó. Me gustaba de crío, de preadolescente, de adolescente, de joven y me gusta de ...(uff, cuesta escribirlo)... adulto. Aquí simplemente un ejemplo. Sus pintas son, en efecto, inenarrables.
Y hasta aquí el post, sin links a wikipedia. Ha habido muchos más (como Pink Floyd, que si no está en el top es porque no fue mi padre el que hizo que me gustara... o The Animals, que por alguna razón no me trae tantos recuerdos a pesar de lo buenos que son).
De los Estados Unidos de América sorprenden muchas cosas cuando se visita (como la sensación que tiene todo de estar manga por hombro y no estar construido para aguantar, como si aún estuvieran colonizando el país) y este post lo quería dedicar a esas pequeñas cosas que, a pesar de tener más sellos de homeland security en el pasaporte que Ozzy Osbourne visitas a urgencias, aún me hacen gracia cuando voy para allá. Todo experiencias personales reales. Y, cómo no, lo hago en forma de top. Top 7 porque no se me ocurren 3 más lo suficientemente originales.
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7- Conducir y saber que siempre puedes girar a la derecha, aunque haya un semáforo en rojo. Esto puede traer problemas cuando vuelves a Europa pero allí mola: es como hacer algo ilegal, pero estando permitido.
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6- Que te pregunten si tenemos pizza en Europa. Ya sé que en España no estamos para hablar con nadie de cultura general pero... ¡que era un ingeniero, no un opositor a maestro!
------------- 5- Hablar con uno que se ha comprado un coche europeo, un Audi A8, y que diga que lo que más le gusta es el poco espacio que necesita para girar.
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4- Darte cuenta hablando con la gente de que eres el único que no ha disparado una pistola en más de 20 km a la redonda (y eso porque a 20 km había un hospital con un ala de maternidad - sí, es una exageración humorística, ¿es que lo tengo que explicar todo?). Me preguntan cómo nos sentimos seguros en Europa y no sé qué responder... "¿la policía?" digo sin mucho convencimiento. Luego me monto en el coche del tipo y tengo que retirar del asiento la caja con la munición. Eso sí, el tipo te tranquiliza diciendo que guarda la pistola en otro lado.
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3- Entrar en un restaurante, pedir ostras (especialidad regional) y que te pregunten si las quieres a la plancha o fritas (fritas significa rebozadas, deep-fried). Yo me las pido porque son típicas pero no me terminan de convencer.
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2- Cagar en los típicos váter-charco (no hay otros). Al principio molesta un poco, sobre todo porque el papel se te moja si lo cortas un poco largo. Pero te acostumbras. Y deja todo por ahí flotando, a su libre albedrío, lo que te permite evaluar tu obra.
Sí, es así, no está inundado o a medias de tirar de la cadena
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1- Pedirte (y comerte) una Baconator: Dos hamburguesas de cuarto de libra puestas una encima de la otra usando queso para separarlas y con bacon crujiente como colofón. Sin lechuga ni mariconadas.
Eso sí, si tienes hambre, y sin salirte del menú ¡te la puedes pedir triple! (yo lo hice pero en vez de patatas me pedí una ensalada para compensar).
Sí, el post está inspirado en la secuencia de "esas pequeñas diferencias" de Pulp Fiction pero al revés. Conmingo haciendo de John Travolta europeo y vosotros, lectores, haciendo de "hijos de puta peligrosos". Por cierto, seguro que a Travolta Vincent Vega no le hizo tanta gracia lo del váter-charco cuando cayó dentro de él en una muerte no muy digna (el link de esta escena lo buscáis vosotros).
-Oye, lo de llamar a los lectores "hijos de puta peligrosos" ¿no es contraproducente? -No, la ironía es eviendente... y le he puesto comillas... además es mejor que la primera idea se me vino a la mente: eliminar el adjetivo con el que termina la expresión y sustituirlo por uno al principio relativo a la raza del personaje que interpreta Samuel L. Jackson... -....Sí... en efecto, mejor así...
Como supongo que todos tenemos asumido que nadie que no escriba aquí va a leer esto nunca, aprovecho la ocasión para dar unos ciertos consejos a los aquí presentes.
No señalaré a nadie con el dedo a la hora de hacer las acusaciones (más que nada porque carece de sentido estar yo aquí como un gilipollas apuntando a mi monitor) pero si daré nombres.
1er consejo (Ehhh Hernandeath): No poner en un texto/post tropecientos vínculos y que todos vayan a la wikipedia, todos sabemos buscar en la wikipedia, que somos de la generación que alucinaba con la Enciclopedia Encarta para el ordenador.
2º consejo (Ehhh Golfo): Los post en Times New Roman igual les gusta a los hypster por parecer retro, pero a pocos más... pero bueno, a lo principal, no hay un vacío entre las minúsculas y las mayusculas tamaño 30 en negrita, también existen la cursiva, la negrita, las mayúsculas al mismo tamaño de la fuente original. Aunque reconozco que tanto Klaus como Hernandeath también han pecado de lo mismo.
3º consejo (Ehhh Todos): Existe un boton para conseguir que los textos salgan justificados.
4º consejo (Ehhhh VultureKulture): Vigila los acentos y sobretodo, no pongas falsos links a paginas de pechugonas para conseguir visitas en tu otro blog.
Lucas Arts, sí, es la compañía que George Lucas abrió para hacer videojuegos viendo que por ahí se podía ganar pasta. Sí, más pasta aún de la que ganó con Star Wars. Y no la abrió para hacer juegos basados en las licencias de sus películas y exprimir la gallina de los huevos de oro, o al menos no exclusivamente, sino para hacer cosas nuevas. Así, pasará a la historia por inaugurar un nuevo género por el que será siempre recordado las aventuras gráficas SCUMM. Y así bajo este sello se crearon verdaderas obras maestras.
Quizá exagere, pero, en mi opinión The Secret of Monkey Island es una de las mejores comedias de aventuras de los últimos 30 años. Y lo digo así, sin especificar a qué género debe pertenecer esta comedia; porque incluyo a teatro, novelas y cine. Sí, ha habido muchos videojuegos más que son soporte para historias geniales (los de Rockstar son un ejemplo) y que deberían ser considerados como el arte que son, pero The Secret of Monkey Island creo que sigue estando por encima porque en vez de utilizar una historia tradicional que pudiera ser llevada al cine (se pensó y a lo que se llegó es a Piratas del Caribe) se explora la nueva manera de transmitir, la interactividad y las sensaciones que llegan al jugador.
¡Mira detrás de ti, un mono con tres cabezas!
Así, mi más sincero homenaje a Lucas Arts: gracias.
He realizado un sacrificio de Semana Santa. No lo de currar, eso me toca todos los putos años. No. Un sacrificio de verdad, un acto de sufrimiento y devoción a Dios apto para estas fechas.
Es más, creo haber purgado todos mis pecados de esta vida, de la anterior y de varias de las siguientes. Como para que un mamón venga a decirme que el catolicismo no reconoce la reencarnación.
¡PUES YA LA ESTÁIS IMPONIENDO PORQUE HE TRABAJADO TODA LA SEMANA SANTA CON LOS ZAPATOS QUE ME PROPORCIONÓ LA EMPRESA!
Dicho así suena a poco, pero para describirlos, debería citar una y otra vez el monólogo de ManoloVieira sobre su Primera Comunión. Seré breve: Todos conocemos esos zapatos que, si los miras de frente, parece que se estén descojonando de la risa. Esos inmutables y duros zapatos diseñados para sobrevivir a la explosión de una mina anti-tanque. El zapato, no tú.
Ni tu pie.
¿Tenéis idea de cómo apretaban los putos zapatos? Si a Jesucristolo hubiesen bajado de la cruz, curado sus heridas y calzado con un par de estos zapatos, les habría suplicado a los romanos que tuviesen un gramo de puta piedad y volviesen a clavarle en la cruz.
¡Las hormiguitas que sentimos cuando se nos duermen los pies saltaban de un pie a otro y acabaron por montar una manifestación por la falta de espacio dentro de esos malditos zapatos.
Y lo peor de mi semana de pasión y sufrimiento, de mi particular Via Crucis, fue la prensa.
Imaginad que, con este dolor de pies, un dolor tal que no te quitas los zapatos por miedo a que los pies no quieran volver a entrar, abres un periódico y ves al Papa lavándole los pies a un tipo.
Lo primero que pensé fue: ¿Dará también masajes? ¡Me vendría genial un masaje papal en los pies!
De hecho le pregunté a mi compañero si iría con los pies limpios a que se los lavara el Papa. Me dijo que sí, por el qué dirán… la tele y todo eso. “Prefiero que el Santo Padre limpie sobre limpio a aguantar otra bronca de mi mujer”, me dijo.
Paso página, y me encuentro una comparativa de los zapatos de Benedicto XVI con los de Francisco I.
¿PERO QUERÉIS DEJAR DE HABLAR DE ZAPATOS Y PIES DE UNA PUTA VEZ?
Lo peor vino al final. Abro el edificio el lunes. Cuento mi triste historia a las señoras de la limpieza, y la única que podría hablar pese al ataque de risa me dijo condescendiente:
“ESO ES PORQUE HAS PEDIDO ALGO…”
¡Os queréis creer que se me olvidó pedir algo antes de hacer el maldito sacrificio! ¡Qué hago ahora! ¿Voy a una Iglesia y le digo a Dios que me debe una como hizo Picadillo en “My name is Earl”?
