Hace tiempo que no veo nada de demagogia barata en nuestro querido Guardián Blindado... Pues nada, aquí va una buena ración.
De todos es conocido que no tengo amor a Cataluña. Reconozco cierta parte de irracionalidad en mis sentimientos... Pero la vileza e inmoralidad de los políticos e instituciones catalanas hacen que sea incapaz de ver la parte buena de esta maravillosa tierra, antaño parte del poderoso Reino de Aragón. A secas Aragón, sin el Catalano- delante para que no se espante.
Los sucesivos gobernantes que han pasado por la Generalidad han sido en su mayor parte populistas bananeros que han ido cuartando poco a poco las libertades individuales hasta extremos cómicos. Está prohibido mostrar mascotas en escaparates porque el pueblo bobo quizá se deje guiar por sentimientos erróneos. Si tienes un cine estás obligado a que el 50% de las películas proyectadas estén subtituladas o dobladas al catalán (por un lado implica una pasta, y por otro, por ejemplo, no puedes poner unas salas de cine en alemán para alemanes en Lloret de Mar como negocio, está prohibido). Y la que más me gusta, la más absurda... no podías abrir una tienda de flores y poner Flores en el luminoso, tenías que poner Flors. Otra pastaza para el que tuviese que cambiar los rótulos de las tiendas, que no son baratos. Alguno pensaría: "¿Valdrá si tapo la E?". Voy a obviar el tema Farça como ejemplo, del brazo deportivo de la Generalidad hablaré en otro momento. Estos son solo algunos ejemplos, pero creo recordar que empecé a escribir esta entrada pensando en los toros, castellers y demagogia...
De todos es conocido que en Catalonia se prohibieron los toros hace algunos años con la evidente intención de distanciarse de las costumbres españolas y hacer creer al mundo que Catalonia es un país mucho más civilizado que los bárbaros españoles, y que en esta terra no se permite el maltrato de animales. Típica argumentación populista que defiende al pueblo frente a las malas influencias: "no penséis, que ya pienso y actúo yo por vosotros". Pero OJO, lo que sí vamos a permitir es que niños de menos de 10 años se suban a "coscoletas" de adultos a una altura de entre 10 y 15 metros sin apenas seguridad. Vivan els castellers, de origen valenciano, por cierto. Total, los niños son de goma y nunca les pasa nada. Menos mal que las instituciones catalanas siempre tratan de tranquilizarnos; según la Coordinadora de Colles Casterlleres de Cataluña, sólo un 3% de los más de 9.300 castells levantados en 2012 sufrió accidentes... Cualquiera con un poco de sentido común y menos de 5 neuronas podrá comprender que un 3% es un riesgo despreciable. De 100 veces solo te escoñas 3 veces.
Reflexión 1: Estoy seguro de que si la adormidera fuese típica de cataluña, la heroína sería más legal que el fuet.
Reflexión 2: Si los niños no fuesen inocentes y si no fuesen educados pensando en el glorioso Reino Catalano-nosequé, seguro que dirían: "Ahí se va a subir tu puta madre, no te jode."